Win-Win o gano-ganas

Nuestra vida es una continua interactuación. Aunque quedemos completamente solos en una isla desértica, deberemos interactuar con la flora y fauna locales, con nosotros mismos, con dios 😉 . Dicha interactuación no solo es nuestro “privilegio”, todo nuestro universo está en continua interacción.

Abeja interactúa con una flor y como resultado recibe comida y al mismo tiempo ayuda a esta flor con su proceso de polinización.

La flor interactúa con tierra, vive, alimentándose de sus minerales y cuando muerte, le devuelve el “favor” como abono para otras plantas.

Dentro de nuestra tierra como resultado de un proceso de interacción química, nace materia prima para las piedras preciosas. Nace el petroleo y cualquier tipo de minerales.

Así está hecha la vida al menos en nuestro universo.

Nosotros, como parte de este universo, también estamos interactuando con todo que nos rodea. Sea la interacción con naturaleza, como en asuntos laborales o de negocios, en relaciones sentimentales o de amistad.

Vamos a ver los tipos de la interactuación.

1. Gano – pierdes.

Normalmente cada uno de nosotros defiende sus propios intereses. En cualquier tipo de interactuación.

En el ámbito laboral los intereses de “jefes” y “trabajadores” son diametralmente contrarios: el interés del jefe – que su negocio le traiga más beneficios posibles. Para ello hace todo lo posible e imposible: desde ampliar el abanico de posibilidades hasta recortar salarios de los trabajadores o suprimir puestos de trabajo. Mientras que en el interés de un trabajador está ganar más y trabajar menos.

El gano-pierdes en tal oposición es clara. Incluso si la vemos del revés: si un trabajador gane más y trabaje menos, en mayor de los casos tal negocio pronto llegará a su ruina y en perdidas estarán ambas partes.
Si alguien ha de perder para que otro gane – mal iremos. Es una lucha constante, es un constante enfrentamiento.
El “gano-pierdes” es ideal para el deporte de competición. Como puede ser futbol, por supuesto. 🙂

2. Tampoco haya paz en la postura “pierdo-ganas” que puede ser como desarrollo de la anterior:”gano-pierdes” o si la veamos en otro contexto, un ejemplo puede ser padre-hijo: padre pierde ante el hijo para hacerle ganar autoconfianza.
En tal caso, el que pierde, notoriamente, es más fuerte.
En algunos casos, perder – es mostrar su debilidad. Hay algunos que prefieren perder (ceder) para que haya paz. Pero en ciertos casos y con cierto tipo de gente, tal estrategia no es vial, pues lleva a pérdidas más grandes aun.

Ejemplo: perdonaron una pequeña infracción a un conductor, dejándole marchar con un aviso verbal. Por ejemplo, iba hablando por teléfono. Y este, pensando que fácil pudo librarse del castigo, mañana va y atropella a un peatón por no prestar atención a la carretera, porque iba hablando por teléfono. Ganó una “batalla”, pero perdió otra, más grande.
(“raíces” de la ley que prohíbe hablar por telefono conduciendo)

También podemos hablar de “perder-perder”, pero yo creo que no merece la pena ni dedicarle nuestro tiempo valioso. 🙂

3. La postura que me gusta más, es la de gano-ganas – win-win.

Como el mismo nombre lo dice: interactuación se realiza de tal forma que todos participantes queden ganando lo que necesita y lo que quiere cada uno. Acaso, no es algo maravilloso?

Pero como todo lo bueno, tal postura requiere cierto trabajo. Para empezar: saber qué es lo que quieres tu, luego tu capacidad de “adivinar” lo que quiere el otro o al menos también pensar en ello. Para que la satisfacción sea mutua, por supuesto, que sea mejor que todas partes implicadas tuvieron desarrollado, así llamada “empatía”.
(Wikipedia): La empatía del griego ἐμπαθής (emocionado) es la capacidad cognitiva de percibir (en un contexto común) lo que otro ser puede sentir.

Ampliando el significado, “sentir” también puede ser “necesitar”. Es decir, saber ponerse en el lugar de otro para saber lo que siente, lo que necesita y cómo puedes tu, con tus necesidades ayudar al otro a cubrir las suyas.

Por supuesto, tal deseo ha de ser mutuo. Que cada uno cuide no solo sus intereses, pero también piensa en los intereses y necesidades del otro.

A grandes razgos, “gano-ganas” podemos aplicar a nuestra interactuación con la tierra: ganamos de ella lo que cultivamos, el agua, su naturaleza, su riqueza. Y a cambio hemos de hacer algo que gane ella: cuidarla, reciclar, no contaminar, no maltratar.

Como puedes notar, para ejercer “gano-ganas” no puedes ser egoista, no puedes pensar mal, no puedes engañar. Solo se hace de buen corazón y con las mejores intenciones. Es por esto, que tal postura se vuelve la postura de interacción del futuro, bueno, que ya es presente. Y si cada día nos la entrenamos un poquito, creo que pronto podemos vivir en una sociedad totalmente renovada y mucho mejor.

Y ahora, puedes poner tu, tus ejemplos de esta interacción de “gano-ganas”?

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