Woe from Wit o “Tu salud está en tu mente”
Esta información puede resultar perjudicial para la industria farmacéutica y también para la sanidad pública. Pero el ser humano es demasiado perezoso para que se sientan amenazados de verdad. 🙂 )))
Nuestra salud física es la consecuencia directa de nuestra salud mental. Como salud mental me refiero a la calidad de los pensamientos que rondan por tu cabeza, tu habilidad de leer las señales de vida.
Es muy simple. Ya no hace falta convencernos mucho de que nosotros somos más que un cuerpo físico. Vea este video
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¿Qué es tu Yo?
A parte del cuerpo físico nosotros tenemos otros cuerpos, llamados “cuerpos sutiles”. Hay mucha información sobre este tema, así que no vamos a repetirla, pues este post tiene otra finalidad.
En este post vamos a analizar los motivos de aparición de las enfermedades. Y para que la explicación te resulte más comprensible, como siempre recurrimos a la ayuda de una analogía.
Supongamos que “tu condicendo el coche” eres tu: tu cuerpo físico es el coche y el conductor el que arranca este coche y lo conduce (da vida y la “maneja”) eres tu (con todos los sentidos de “tu”: alma, ego, mente, pensamientos …).
Si eres conductor, entonces deberías saber qué son las “bandas sonoras” de las arcenes que al pisar las ruedas del coche, lo hacen vibrar de forma característica y así mantener despierta la atención del conductor. Cuando en nuestra vida, nosotros desviamos de nuestro camino, la realidad también nos envía avisos, lo que pasa que nosotros no nos vemos, no podemos destinguir, no podemos leer, capturar. En fin, estos avisos pasan desapercibidos para nosotros.
Como consecuensia de no poder leer estas señales, no corregimos el rumbo de nuestra vida y seguimos en la “dirección tomada”. La vida nos manda otras señales que de la misma manera no supimos reconocer y así consecutivamente hasta que la vida (nuestro destino, la realidad, dios, como quieras que lo llame) empieza a darnos toques “gordos”, “palpables”, como diciendo “¡corcholes! pero mira adónde vas!!!!” 🙂 Ya no es la banda sonora, ya la saltamos y empezamos a rozar la barrera protectora. Estos toques son los últimos avisos sobre nuestro cuerpo físico que es el último cuerpo que “viste” nuestra alma, por lo tanto es la única oportunidad para la vida de decirte que algo que haces no está bien hecho. Aun así, en vez de leer estas señales y cambiar el rumbo, nosotros empezamos a ensordecer los síntomas para no notarlos, para que nos dejen en paz. ¿Te imaginas QUÉ delito contra nuestra vida estamos cometiendo??????????
Nuestro coche está rozando contra la barrera protectora, está chocando contra ella y nosotros “tan panchos” le ponemos los parches, le hacemos los arreglos cosméticos en vez de eliminar la causa: aejarse de la barrera o tomar otra dirección.
No sé tu, pero yo, en cuanto me plantee el asunto desde esta perspectiva, dejé de tomar cualquier tipo de medicamentos, olvidé de los médicos y ahora prefiero llevar la vida sana: dejé de fumar, como sano (sin obsesionarme con las dietas), hago ejercicios físicos y de energía y sobre todo, mantengo mi mente sana.
Aplicando estos conocimientos, se puede combatir practicamente cualquier enfermedad, puede que salvo casos muy graves.
Prácticamente solo falta encontrar la causa de la enfermedad, trabajar con tu mente y ser feliz. Sí, la felicidad es curativa. Si tienes muchas ganas de estar sano, si estás dispuesto a adiestrar tu mente y eres un cabezota, podrás lograrlo. En esta vida TODO es posible.
Hablando del tema, me gustaría trabajar con alguien, que quiere comprobar este modo de curacíon.
El proceso sería siguiente:
1. Diarnóstico del problema, es decir, averiguar la causa psicosomática de la enfermedad.
2. Elaborar el plan de acción personalizado.
3. Trabajo sobre el proceso inicial.
4. Seguimiento.
Por supuesto, hay más trabajo de lo que he escrito aquí, pero el objetivo final de todo este trabajo a mi parecer vale mucho la pena. Yo estoy dispuesta trabajar. Y ¿tu?
Si te atreves :), podemos hablar, aquí tienes el formulario de asunto pon “vida sana”.
Y si no, toma en consideración lo escrito aquí, plantéa la cuestión de tu salud de otra forma y aplícalo tu mismo a tu vida.
SKH
Si quires leer más sobre la relación entre cuerpo y pensamientos, te puedo recomendar el libro de Luise Hay “Sana tu cuerpo”
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